lunes, 23 de junio de 2014

VILLACARRILLO. CORPUS 2014

Un año más tengo la suerte de poder visitar mi pueblo en una de sus fiestas mas significativas la festividad del Corpus Christi.   


El Santísimo Sacramento por calle Guadalquivir
Como orgulloso campiñés cuelgo en estas páginas unas fotos de este gran día.
Parroquia de la Asunción
Puerta del Sol. Inicio del itinerario


Plaza Poeta José García Nieto




Calle San Fernando





Carmen                        
Minas

Calle San Vicente primer tramo
San Vicente segundo tramo

 San Vicente tercer tramo

Altar Cofradía Caída y Oración en el Huerto

Altar cofradía del Sepulcro

Primer tramo de Avenida Guadalquivir
Segundo tramo Avenida del Guadalquivir
Altar Cofradía de San Isidro


Tercer tramo Guadalquivir
Altar  Entrada en Jerusalén








Calle Andrés Segovia
Puerto Montes. Rincón precioso y sin decoración ¿por que no lo decora el Ayuntamiento?
Puerta de la Umbría, desde donde se imparte la bendición al finalizar la procesión







                                                       




lunes, 17 de marzo de 2014

CÁSTULO Y LOS PUENTES ROMANOS DEL NORESTE DE JAÉN

La ciudad ibérica de Cástulo, se puede considerar como uno de los núcleos fundamentales de la Oretania. Situada a pocos kilómetros de Linares en la carretera que une esta ciudad con Torreblascopedro. Hoy es el principal yacimiento arqueológico de la provincia.


Cástulo

Cástulo


Cástulo. Mosaico descubierto en 2012




Detalles del mosaico descubierto en 2012

Cástulo fue un "oppidum" ibero, con moneda propia y liberado de la influencia fenicia y tartéssica. Aliado de Cartago en la Segunda Guerra Púnica por alianzas matrimoniales entre Aníbal y la princesa Himilce. Posteriormente, sometidos por Escipión, llegara a convertirse en municipio de derecho latino en época del imperio.
Por su importancia a lo largo de milenios fue zona de cruce de caminos. Por allí pasaran el llamado Camino de Aníbal, la Vía Heraklea y sobre todo la Vía Cástulo-Saetabis. Todos son una misma cosa, ya que comunicaban la zona del Guadalquivir con el levante, bien hacia Sagunto, bien hacia Cartagonova.
De estas vías, aun podemos admirar puentes romanos, algunos de ellos de gran belleza y poco conocidos.
Puente romano de "El Pielago" sobre el río Guarrizas


Puente romano sobre el río Montizón. Santisteban del Puerto

Puente Mocho sobre el río Guadalimar. Margen derecha de Chiclana de Segura, izquierda de Beas de Segura




domingo, 2 de marzo de 2014

JACINTO HIGUERAS FUENTES

En  capítulos o apartados sucesivos quiero hacer una presentación del insigne escultor santistebeño Jacinto Higueras Fuentes. Poco conocido. Hagamos justicia.


1 - LA INFANCIA DE NUESTRO ESCULTOR.

El siglo XIX se aproxima a su final. En Europa, los Movimientos Obreros adquieren cada vez más fuerza en su lucha por el bienestar de los trabajadores, pese a la crisis de la Primera Internacional. La sed imperialista prepara el reparto de África, que tendrá lugar en 1884 con la Conferencia de Berlín. El teléfono, el fonógrafo, la lámpara eléctrica, el automóvil y el cinematógrafo, comienzan a dar sus primeros pasos. Pasteur, descubre la vacuna contra la rabia.

En nuestro país, en el aspecto político, una vez finalizada la Tercera Guerra Carlista y promulgada la Constitución de 1876, también llamada Constitución de Cánovas, comienza el periodo que se conoce con el nombre de Restauración.

En lo económico y social, una deficiente revolución industrial va a favorecer a las regiones periféricas de Cataluña y País Vasco. La industria malagueña que había surgido como pionera y con gran fuerza, ha sido flor de un día. La inmensa mayoría de España sigue siendo rural, aunque el humo del ferrocarril empieza a dejarse notar como señal de progreso y el movimiento obrero comienza a adquirir caracteres identificativos. Es más lo que debemos considerar regresivo, las inadecuadas e injustas formas de propiedad, los bajos rendimientos, las deficiencias técnicas y las malas condiciones de vida.

Nuestros  vecinos  europeos no desean las relaciones con un país que tiene graves problemas en la defensa de sus costas, sus archipiélagos y sus últimas colonias Cuba, Puerto Rico y Filipinas, a lo que hay que agregar su escasez de recursos económicos y militares. Problemas que serán aún más evidentes por el afán imperialista norteamericano que nos llevará a la catástrofe de 1898.

La cultura española nos sorprende, al igual que en el siglo XVII,  con un apogeo. Si a aquel resurgir se le llamó Siglo de Oro, a este se le ha llamado, en ocasiones,  Edad de Plata. A figuras como Gaudi, Pardo Bazán, Ramón y Cajal, Sorolla y toda la Generación del 98, hay que agregar la Institución Libre de Enseñanza o el Orfeó Catalá .

En esta época y concretamente en 1877, nace en el seno de una familia de campesinos algo acomodados Jacinto Higueras Fuentes. Su partida de nacimiento dice:                                                    
" En la villa de Santisteban del Puerto a las diez de la mañana del día veinticuatro de febrero de mil ochocientos setenta y siete, ante el señor Don Manuel Moreno Vela, Juez municipal suplente y Don Andrés Medina Curiel, Secretario de esta población, compareció Modesto Higueras Curiel, natural de esta Villa, término municipal de la misma, provincia de Jaén, mayor de edad, casado, propietario, domiciliado en dicha villa, calle de las Minas, según Cédula número 197, presentando con objeto de que se inscriba en el Registro Civil un niño y al afectado como padre del mismo, declaro: Que dicho niño nació en el domicilio del compareciente el veintidós de los corrientes a las dos de la tarde. - Que es hijo legítimo del declarante y de Doña María del Carmen Fuentes Martínez, natural de esta villa, provincia de Jaén, domiciliada en el de su marido...
Santisteban del Puerto desde el cerro san Marcos

En este rincón de la provincia de Jaén, abrazado por los cerros de La Guarida, San Marcos y el Castillo,  transcurrirán los primeros años de su vida, una vida juvenil en la que   el color rojizo de la tierra de El Condado quedará fijo en su retina e incluso lo utilizará en su labor escultórica. Son recuerdos que nunca olvidará a lo largo de su vida, vida que si cambiará a base de tesón, voluntad, interés, auto educación y curiosidad por conocer y saber de las cosas. Desde los primeros momentos se siente atraído por el mundo artístico, pero no sólo en el campo escultórico, el siente interés por todo el mundo del arte en toda la amplitud de su significado y lo demostrará a lo largo de su vida, con dibujos, proyectos, críticas y comentarios.

El joven Jacinto sentirá en un principio gran entusiasmo por la pintura. Emborronará papeles y más papeles  intentando expresar lo que su alma siente a través de unos trazos, que desde los primeros momentos son trazos realistas y firmes, que harán que sus padres no duden en sacrificarse, pues sacrificio era y grande en aquella época, en la que dos brazos que trabajasen el campo, que condujesen los bueyes en las labores agrícolas, o que recogieran los frutos de los olivares jiennenses, eran absolutamente necesarios.

Los padres no dudan en solicitar consejos al maestro, que también sufría las distracciones del alumno, distracciones causadas por su interés por la pintura y es el maestro el primero en advertir que en sus manos no había un niño distraído, sino una semilla de artista. Ayudó a Jacinto para que se liberará de su destino natural que venía marcado por la sociedad de la época, esa sociedad rural y pueblerina que era la que le rodeaba. Es justo no olvidar aquí el nombre de aquel hombre que supo salvar unas manos para el arte en lugar de reprimir al muchacho y hacer que olvidara sus aficiones a cambio de una mal aprendida tabla de multiplicar.  Ese maestro ejemplar fue Amador Chércoles.

El propio artista se encargará de remarcar su primera afición pictórica y en una entrevista de madurez, dirá: " Desde muy niño sentí una gran afición por la pintura, emborronando con dibujos cuantos papeles caían en mis manos y ensuciando las paredes de la casa paterna con mis balbuceos pictóricos " (1).

Para ir completando la visión de Higueras como artista total, no podemos olvidar que siendo aún joven, casi un niño, gustaba de acompañar a su padre en los viajes que realizaba a la capital de la provincia o pueblos importantes de la misma en los que el arte estaba presente. El mismo dirá, muchas veces, a lo largo de su vida, que se ensimismaba contemplando las obras de arte de la catedral de Jaén y que sentía admiración por Andrés de Vandelvira, aquel arquitecto del siglo XVI, que supo llenar todo el Santo Reino con obras maravillosas, desde Villacarrillo a Jaén, pasando por Sabiote y Huelma y sobre todo en Baeza y Úbeda, lugares todos ellos donde encontramos la huella de Vandelvira. 


Fue en la iglesia de El Salvador de Úbeda, posiblemente la mejor obra vandelviresca, donde pudo admirar una obra escultórica con el tema iconográfico del Bautista joven, que siempre se había atribuido a Miguel Ángel y que se perdió en ese momento trágico de nuestra historia, que fue la Guerra Civil. El recuerdo de esta escultura le llevaría a plasmar años después el San Juanito de Navas.



Desde joven, sintió también gran amor por la música, una de las bellas artes que sabía escuchar e interpretar. Tuvo gran amistad con el que después sería un reconocido compositor de música sacra Esteban Moreno Ochoa, monje benedictino desde 1904 y que en 1908, marchó a Australia y al que no volvería a ver ya que muere en 1953 en Marsella, cuando volvía con intención de hacer una visita a España. Con el paso del tiempo pudo disfrutar de esta faceta artística, ya que gran parte de su vida estaría acompañado de la gran violinista Dolores Domínguez Palatín, su segunda esposa. Sus propios hijos sentirán gran vocación por esta rama del arte. El artista dirá en numerosas ocasiones: " De volver a nacer, me gustaría ser músico".

El manejo de la gubia lo inicia en casa de un carpintero, amigo de la familia, el joven Jacinto, diseñaba puertas y luego ayudaba en su elaboración.

No podían pasar desapercibidas las aficiones de este niño, su familia, su maestro y el pueblo en general conocían su capacidad artística. Paralelamente al crecimiento natural y artístico de Jacinto, crecían también los deseos familiares de salvarlo de lo cotidiano y pueblerino. No dudan en solicitar nuevos consejos y colaboraciones, ambas cosas encontrará en el seno de una familia influyente y bien relacionada con Práxedes Mateo Sagasta. Obtendrá una beca de la Diputación Provincial de Jaén,  que le permitirá trasladarse a Madrid para formarse como pintor en el estudio de Federico de Madrazo y Kuntz, pintor de corte neoclásico, pero que llegó a sentir la influencia del romanticismo francés y alemán. Gran retratista, aunque también cultivó el tema  histórico y religioso. La suerte no le fue favorable a nuestro artista, pues perece ser que no llegó a conocer al maestro, pues su llegada a la Corte coincide con la muerte del pintor. Jacinto Higueras diría de su llegada a Madrid: " A los diez y seis años de edad me presenté en la Corte con la bolsa harto flaca y un tesoro de ilusiones inagotables " (2).


Si con la ayuda de la imaginación, nos trasladamos a nuestra primera juventud y nos situamos en un Madrid de fin de siglo, al igual que nuestro artista. ¿ Qué sentiríamos ?. A la mayoría de los atrevidos a imaginar, nos apresaría la desilusión, el miedo, las ganas de volver a la tierra que nos vio nacer. Nuestro artista fue fuerte, su enorme ilusión, el recuerdo de los sacrificios familiares y pensar en las ilusiones que habían puesto en él, hacen desaparecer los nubarrones que se ciernen sobre su cabeza, nubarrones suficientemente negros para sobrecoger a cualquiera que se encontrara como él, perdido en esa gran ciudad que le era absolutamente desconocida. Su voluntad, ilusiones, recuerdos y alguna mano amiga, conseguirán algo inesperado, incluso para el joven artista. Un cambio de rumbo le llevará a la fama por el triunfo, será el paso de pintor por vocación a otra rama artística por necesidad, el lenguaje escultórico. Se presenta la ocasión de conocer a otro maestro, ya grande en fama aunque solamente trece años mayor que él, el catalán Agustín Querol y Subirats, formado en Roma y que había regresado a España para establecerse en Madrid en 1887. Gaya Nuño dice de este artista: "...alcanzó de lleno y sirvió rebosantemente los momentos en que la escultura española desmentía su propio ser, obstinándose en figurar nubes, olas, gasas, para que de ellas surgieran las más galopantes, confusas y alocadas alegorías, en un frenesí de insensatez absoluta y antiplástica ". (3)

(1) y (2) Revista Ilustración Moderna. Entrevista realizada por Florencio Gómez Ortega.
(3) - Juan Antonio Gaya Nuño. Escultura Española Contemporánea. Ediciones Guadarrama

martes, 25 de febrero de 2014

JACINTO HIGUERAS. SUS PRIMEROS MAESTROS


Higueras comenzó el aprendizaje con Agustín Querol cuando éste labraba los frontones de la Biblioteca Nacional, lugar que posteriormente albergará una de sus obras, concretamente la conocida como "Lapida de Caldas", relieve en bronce en honor a Jose de Caldas en el 108 aniversario de su muerte. Poco más sabemos. No habló mucho  de su primer maestro, únicamente hará referencia en algunas revistas al momento de su presentación. Cuenta que una vez que Querol observó los dibujos que llevaba como carta de presentación, observó en ellos más que proyectos de pintura trazos de bocetos escultóricos. Preguntándole si había modelado alguna vez en barro, él respondió que no. En ese mismo momento le propuso probar y le entregó un poco de barro y una mano de escayola para que la copiase, junto con unos palillos de modelar para que eligiese los que necesitaba. El joven aprendiz dudó, pues nunca se había enfrentado  con tales instrumentos y el escultor, sonriente, se los retiró mientras le aseguraba que ninguno valía nada en comparación con los cinco palillos de su mano y de los que siempre debe hacer uso un buen artista. Copió la mano y con tal perfección, que Querol dudó de la negativa que le había hecho con relación al barro. Su primer trabajo en el taller fue copiar una cabeza de Donatello y, quizás por esto, siempre sintió gran admiración por el maestro del Quattrocento italiano.


Frontón Biblioteca Nacional. Agustín Querol
Tres años trabajó con Querol. Trabajando como aprendiz y con veinte años recién cumplidos, participó en la Exposición de Bellas Artes de 1897. Obtuvo una mención honorífica y estas palabras del jurado: " Caramba, temprano empiezas muchacho ". No se sabe con exactitud la obra en cuestión, pero`podría ser un barro cocido del que se dice: "...era una cabeza arrogante y erguida de un hombre, con la melena al viento y el torso en actitud de arrastrar tras de sí a las multitudes en un titánico esfuerzo " (Revista Paisaje. Octubre 1947. Artículo de D. José de la Vega Gutiérrez) (4). De esta obra de sus principios se dice que era muy querida por el escultor, sin especificar la razón de esta preferencia. Fue regalada al padre del autor del artículo y decoró algunos años su despacho. Al trasladarse este señor a Madrid, no la llevó consigo y la entregó al Colegio de Santo Tomás, del que había sido muchos años profesor. Allí quedó ornando la sala de profesores.  Actualmente se desconoce el paradero. Sólo sabemos que el escultor la titulaba: El Caudillo de la Huelga.

De su separación de Querol, la única explicación conocida que tenemos es la dada por el propio artista, que siempre dijo que existía una oposición de caracteres. Los amigos que lo conocieron, siempre adujeron que este primer triunfo sirvió para enorgullecer al discípulo y molestar al maestro. En 1898, un año después de la Exposición, año de triste recuerdo histórico por la perdida de las últimas colonias, lo encontramos trabajando con Mariano Benlliure y Gil, maestro valenciano y solamente quince años mayor que Higueras, pero ya un maestro consagrado, pintor y escultor, aunque sobresalió más por lo segundo que por lo primero. Su obra tiene un claro sentido realista, basado en la observación, y gran expresión de vida y movimiento. Las estatuas de Goya, frente al pórtico norte del Museo del Prado, y la de Alfonso XII, en el Retiro madrileño, entre otras muchas, son fruto de su buen hacer.

Por Benlliure,  declarará siempre admiración nuestro artista, refiriéndose a él como su auténtico maestro, algo que se puede comprobar en una amplia correspondencia epistolar.

Se conservan algunas cartas del maestro dirigidas al discípulo, incluso de fechas posteriores a su independencia artística, en todas se ve la amistad y la confianza que el maestro depositaba en su  amigo y no discípulo.

En una, fechada el 15 de abril de 1908 y escrita desde Villalba, le ruega se encargue de algunos asuntos relacionados con el montaje de una de sus obras y le pide que pase por su despacho para recoger una carta y le encarga que se entere si una de sus obras había sido admitida en una exposición.

En otra del 2 de junio del mismo año y dirigida al señor Martitegui, Primer Teniente de Artillería, pide que permita a su discípulo Jacinto Higueras, hacer un apunte de la boca de un cañón con su tapabocas.

Con fecha 1 de junio de 1911 y aprovechando el traslado de Jacinto Higueras a Barcelona para estar presente en la fundición de, quizá su primera gran obra, el Monumento a las Batallas de Jaén, Benlliure escribe una carta confiándole asuntos muy personales. En esta carta se lee como el maestro deposita toda su confianza en el antiguo discípulo, pues hay un párrafo que textualmente dice: " No tenga inconveniente en leer la carta, con Vd. tengo confianza y el asunto no es nuevo para Vd." Le hacía depositario de una carta a un tercero relacionada con un problema familiar delicado.

Por último, hay otra fechada el 5 de marzo de 1915 en la que entre otros párrafos se pueden entresacar dos. En uno dice: " Ya sabe que las cosas suyas las considero mías. " En otro, le pregunta:   "¿qué hay por ahí? ¿ colocó ya la estatua ?". Se percibe con suma claridad el interés por la obra de Higueras, del que había sido su maestro. La estatua a la que se refiere, es muy posible que fuese la erigida en Jaén en memoria de Bernabé Soriano.

En las primeras obras de nuestro artista, se ve con claridad reflejado el estilo benlliuresco. Estilo barroco en el que lo acaracolado y rizado predomina y el gusto por las posiciones al tipo fotográfico de sus modelos, imitando precisamente eso, una fotografía, el nuevo invento que hará furor en la sociedad acomodada de la época.

Todas esas características las podemos observar en algunos relieves de esos años, como el Relieve Familiar en bronce, en el que cinco figuras se superponen como si de una fotografía se tratase, o en el Medallón a Gregorio Domingo. Esta última, es una escayola que se conserva en el Museo dedicado al artista. En ella, se pueden apreciar rizos, al estilo Benlliure, en el cabello de su fraternal amigo.

Relieve familia Cátedra
Este estilo que encontramos en algunas de sus primeras obras no va a ser duradero, pues si con él trabaja aproximadamente unos diez años, podemos asegurar que son años de duda en la vida del artista, admira al maestro y amigo, pero no se siente identificado con su labor, no está convencido de poder seguir su camino, no es partidario de lo menudo, lo detallado, lo poco monumental, que caracteriza a Benlliure dentro de su grandeza. El quiere otra cosa y vuelve la vista atrás para posarla en artistas lejanos en el tiempo, quiere lo clásico, lo monumental y lo verosímil. Los artistas del XV, XVI y XVII son su obsesión y siempre lo expresará en numerosas ocasiones. En una entrevista realizada por Sánchez Camargo, para el periódico hablado de Radio Nacional de España, relaciona a sus artistas favoritos desde los tiempos clásicos hasta el momento actual y nombra a gran número de ellos, pero deteniéndose principalmente en Donatello, que fue motivo de su primer contacto con la escultura, y en Martínez Montañez, otro lejano artista jiennense, al que no se cansa de ensalzar y que incluso sería el elegido, en su día, para el discurso de presentación como Académico en 1944. Igualmente, como si el destino lo tuviese previsto, fue su última obra, que no llegó a terminar y lo haría su propio hijo.

Busto de Martínez Montañez

Si con Querol rompió por oposición de caracteres, es raro que conviviese con Benlliure, pues el maestro es comunicativo, dado a hacerse su propia propaganda entre las altas clases sociales y políticas de su tiempo, dispuesto a alabar con tal de ser alabado, en pocas palabras podríamos decir de Benlliure que era un gran escultor, pero también  un magnífico relaciones públicas. Higueras era,  en cambio, reservado, tímido y poco locuaz. La oposición de caracteres es grande, pero en este caso más que choque frontal, nos encontramos con dos personajes que se complementan.

En torno a 1910  empezó a realizar sus primeros bocetos para monumentos, unos consumados, otros no los realizó, pero no debemos olvidar que estamos en un periodo en el que los derroteros del arte empiezan a buscar nuevas formas expresivas; están surgiendo nuevas corrientes muy alejadas del clasicismo y de lo monumental, además las economías española y europea no viven sus mejores días, no pueden permitirse el alto coste de obras grandiosas.
En 1910 presento a la Exposicion Nacional la maqueta de un relieve conmemorativo de la batalla de Bailen. Por está maqueta recibió una Segunda Medalla de la Exposición Nacional. El monumento a dicha batalla nunca se realizaría. La Revista Blanco y Negro en su número 1018 publico cuatro fotografías de esta exposición y junto a la maqueta de Higueras aparecen:
                            "Amor y Trabajo"de Roberto Rubio.
                             "La Cuesta de la vida" de Alejandro Ferrant.
                            "La Diosa" de José Clará.
 
La Diosa de Clará. Plaza de Cataluña
                           
La medalla de plata recibida, si dio pie a que don José del Prado y Palacios, le encargase un monumento conmemorativo a las dos grandes batallas de la provincia de Jaén. El monumento fue inaugurado el 20 de octubre de 1212, celebrándose de este modo el setecientos aniversario de la primera gran batalla de las Navas de Tolosa.

Monumento a las batallas. Jaén
Victoria original. Santisteban del Puerto

Consiste en un plinto trapezoidal, sobre el que se levanta un pedestal con dos relieves laterales en bronce, alusivos a ambas gestas. El de las Navas muestra un grupo de rotundos guerreros, con cuya masa parecen sugerir un movimiento de caballería pesada. Por el contrario, el de Bailen ofrece un dinamismo y anécdota mayor, propia de un concepto romántico de la escultura decimonónica. Del centro arranca una columna palmiforme egipcia rematada en una Atenea-Niké, diosa helénica de la Victoria, esculpida de bronce con las alas desplegadas y personificando el Triunfo. La diosa concebida desnuda, en el monumento aparece envuelta en sutiles gasas por los prejuicios morales de la iglesia y de la  alta sociedad de la época.


A partir de este momento Jacinto Higueras empezará a ser reconocido e instalara su propio taller en Madrid.

El artista en su taller

En Europa va a estallar la Primera Gran Guerra y España, por su neutralidad, tiene unos años de beneficio económico, pero será beneficio para los capitales industriales, que no son precisamente los mecenas del arte. Son beneficios para un grupo social reducido, el resto de la sociedad española vive lamentándose de la pérdida colonial y se respira inseguridad en todos los aspectos. Esta inseguridad arrancaba con la Semana Trágica de Barcelona en 1909, numerosas huelgas generales en las zonas industriales de Barcelona y Bilbao y el problema con Marruecos que durará hasta 1926. 

martes, 18 de febrero de 2014

JACINTO HIGUERAS. INDEPENDENCIA ARTÍSTICA

Su independencia artística comenzará con la elaboración de un boceto con el que siempre había soñado, pero que nunca se realizará. Se trataba del boceto para el monumento que debía conmemorar un hecho histórico acaecido en 1808, la Batalla de Bailén.

Lo concibe como un gran pedestal de piedra y sobre él, la figura de un piquero español que acosa a un coracero francés.


Maqueta monumento a Bailén
Era su anhelo, pero quien decidirá será el señor Prado y Palacios. No olvidemos que el artista tiene deseos de trabajar y hacer algo grande en su tierra, pero no tiene los medios necesarios, por lo que ha de admitir que Prado y Palacios pueda decidir.

Se acuerda que ese monumento  no debe conmemorar la gesta de Bailén, sino que se convertirá en un monumento que recuerde las dos históricas batallas que se llevaron a cabo en tierras jiennenses. Así, la idea del artista no se ve truncada, sino ampliada y se convertirá en un gran monumento  que conmemorará dos gestas guerreras muy separadas en el tiempo, pero muy próximas en la geografía.
Relieves de la base del monumento
Batalla de las Navas de Tolosa, acaecida el 16 de julio de 1212. En ella se enfrentan los ejércitos cristianos de Alfonso VIII de Castilla, Sancho VII "el fuerte", de Navarra y Pedro II de Aragón, contra el ejercito almohade, mucho mas numeroso,  de Muhammad An-Nasir "Miramamolin". 


Batalla de Bailén, ocurrió un 19 de Julio de 1808. Se enfrentan los ejércitos  de Dupont y los de Castaños.



Además de su independencia artística, va a suponer también la posibilidad de establecerse y formar su propio hogar. Había contraído matrimonio con Juana Cátedra, jiennense y santistebeña como él, a quien conocía desde la niñez y que ya había fotografiado, pues fotografía parece el relieve familiar  ya mencionado en la entrada anterior.

Juana, fue humilde y cariñosa, mujer ejemplar, criada en un ambiente lejano al arte, pero supo adaptarse.  Observaba y aconsejaba en los momentos que era requerida. Fue un matrimonio por amor. Fueron dos caracteres parecidos, retraídos, tímidos y que sólo vivían para sus tres hijos venidos pronto al matrimonio. No les importó la sociedad y el mundo que les rodeaba, únicamente la familia y la obra del artista era lo fundamental y a ambas cosas se van a dedicar plenamente.
Foto familiar

En estos primeros años  de la segunda década del XX, el artista tiene su domicilio en Madrid, en la calle Torija, pero va alternar los trabajos en Madrid con los realizados en Jaén. Los bajos de la Diputación, le servían de estudio. Jaén, su tierra natal, contará en 1912 con un gran monumento, el primero salido de sus manos. Inaugurado el 20 de octubre.

La fama y el reconocimiento  empiezan a dar sus frutos, prueba de ello es no sólo la medalla obtenida por la maqueta de la batalla de Bailén, sino la concesión de la Cruz de Primera Clase al Mérito Militar con distintivo blanco. Los encargos se van a suceder en su tierra olivarera por la que sentirá un cariño especial.

Otras obras suceden a su primer triunfo, entre otras, podemos mencionar: Monumento a Bernabé Soriano, bustos en bronce de su promotor don José del Prado y  don Niceto Alcalá Zamora.

Bernabé Soriano

Con motivo del  tercer centenario de la muerte de nuestro gran Cervantes, se celebra en Madrid una exposición de bocetos, en el Palacio de Cristal, para erigir un monumento al gran escritor. Se presentan cincuenta y tres obras, la número cuarenta y ocho aparece con el siguiente pie:
                 Don Victoriano Ortiz, Arquitecto de Madrid.
                 Don Manuel Jorreto, escultor de Madrid.
                 Don Jacinto Higueras, escultor de Madrid (5).

El periódico El Liberal de fecha 6 octubre 1915, ensalza esta maqueta por su elegancia, así como por la limpia esbeltez de sus columnas.


Maqueta Monumento a Cervantes
Maqueta en Exposición Palacio de Cristal
La seleccionada fue la del arquitecto Rafael Martinez Zapatero y el escultor Lorenzo Coullat-Valera.                                                       No se iniciaría su construcción hasta 1928 y bajo la dirección de Pedro Muguruza. Hoy se puede contemplar en la Plaza de España de Madrid

En 1916, interviene en la Exposición Nacional de Panamá, celebrada con motivo de la inauguración del canal transoceánico. Su maestro Mariano Benlliure obtendrá Gran Premio por su obra titulada "La Bailaora". Higueras será Medalla de Oro con una obra realista y llena de verdad,  Manigero Andaluz, que muchos años después, en 1942, recibirá un Premio Extraordinario de la Diputación de Barcelona. A la exposición de Panamá presentó la  obra mencionada, y la titulada "Gitana" y que algunos críticos rebautizaron con un título algo despectivo "Raza Fecunda".

Manigero Andaluz
Gitana
La alegría por sus triunfos, se va a trastocar en tristeza. En 1919, muere su esposa. La revista Don Lope de Sosa se hace eco del momento diciendo: " Jacinto Higueras, el genial artista, orgullo de la provincia y honra de España, vive ahora los días más tristes y dolorosos  de su vida. Juana Cátedra, su fiel compañera, la que con él compartía dichas y pesares, la que animaba en momentos de esperanza y desmayo impulsándole a seguir con más brío, con mayores entusiasmos, la trabajosa senda de la gloria, ha muerto joven aún, dejando a nuestro amigo sumido en la desesperación y el desconsuelo sin más fuerza que para llorarla y sin otra idea y otro pensamiento que su recuerdo " (6).

Juana, había marchado al pueblo natal de ambos, para dar a luz su cuarto hijo. Los dos tuvieron siempre la ilusión de que sus hijos fuesen andaluces y jiennenses, pero esta vez la idea fue nefasta, pues posiblemente en Madrid todo hubiera ido mejor.

De este tiempo transcribimos párrafos de una carta del artista a su esposa que son ilustrativos, pues nos reflejan un momento de gran interés histórico, a la vez que el sentir del artista en su distancia. Dicen:

"Querida Juana: Como lo de correos anda tan mal, aunque parece se está arreglando ya, no he querido escribir, y ahora precisamente cuando voy a buscar el papel para hacerlo, llaman al timbre y me entrega tu carta uno de los nuevos carteros, pues los antiguos se han quedado cesantes, los pobres, con motivo de la huelga.

Estos días ha estado la cosa peliaguda. Se creía se declarase la huelga general y ocurriera en Madrid una segunda edición de lo que está pasando en Barcelona" - continúa después - "... Procura tú no ser pesimista y de creer casi con toda seguridad que este parto va a ser el más feliz de todos " - más adelante y refiriéndose a sus hijos, agrega - " ... ! Que alegría si pudiese yo estar con vosotros !. Me da pena ver que es imposible que yo pueda gozar del campo y trabajar en plena naturaleza, pintando y modelando... ! Quién fuese pájaro para volar e ir a vuestro lado aunque no fuera mas que para besaros y volver". 


Esta carta fechada en los inicios de la primavera, sería de las últimas a su esposa, pues en los primeros días del verano moría ella y el hijo de sus entrañas, dejando al artista sumido en la tristeza y con tres hijos pequeños. 


Andrés
Luis
                                 
                                           Jacinto

(5) - Catálogo de la Exposición de bocetos para el monumento a Cervantes en el Tercer Centenario de su muerte. Madrid, octubre 1915.
(6) - Revista Don Lope de Sosa